S A R A P O Z O S
¿Cómo se puede vivir en un mundo en el que las diferencias son pretexto para los discursos de odio más encarnizados contra todos aquellos que profesan una fe distinta?
En realidad, se vive a medias; se sobrevive.
El encarnizado discurso de odio contra los que profesan una fe distinta destruye la dignidad humana del creyente.
No destruye la fe pero sí la dignidad humana.
Ese discurso los acorrala en las redes sociales en donde el ejercicio de la libertad de expresión se confunde con ataques sistemáticos de odio y prejuicio.
En este espacio encontrarás esta y otras reflexiones, estos y otros argumentos, estas y otras historias. Encontrarás honestidad en el texto que siempre será una propuesta para fomentar una cultura del respeto por todos.
El estilo es el mío, el que he desarrollado los últimos veinte años, desde la academia pero también desde el ejercicio de la libertad de expresión.
Te invito a que sigas este espacio, lo retroalimentes y, quizá, juntos podamos construir una sociedad con menos prejuicios y más respeto, con menos odio y más amor.
“… nadie me habla. Es por que soy diferente.
Intento fingir que no importa; pero sí importa.
¿Siempre va a importar?...”
(Escena de la película Wonder 2020).